LinkedIn y la Censura Masiva
Escrito por Plexus Radio el 4 junio, 2024
LinkedIn y la Censura Masiva: El Impacto en la Libertad de Expresión Profesional
En una polémica situación que ha sacudido a la red social profesional LinkedIn, millones de usuarios han sido víctimas de censura y eliminación de sus cuentas tras compartir contenido relacionado con los supuestos delitos de Hunter Biden, hijo del presidente Joe Biden. Estas acciones han generado un intenso debate en torno a la libertad de expresión y las prácticas de moderación de la plataforma, dejando a los usuarios afectados sin una resolución clara.
La controversia comenzó cuando usuarios notaron que sus cuentas estaban siendo suspendidas y eliminadas sin previo aviso ni explicación clara. Muchos de ellos habían compartido publicaciones e investigaciones que señalaban presuntas actividades ilícitas y conflictos de interés relacionados con Hunter Biden.
El propietario y CEO de Plexus Radio Network, Roger Baltá, también fue uno de los afectados al ser silenciado por LinkedIn al publicar un artículo relacionado con una detención de Hunter Biden en un Aeropuerto. La primera respuesta que recibio Roger al contactar con LinkedIn en un Email fue que esa noticia era falsa.
Roger recibió un segundo email donde Linkedin cambió su versión diciendo que era contenido no permitido y que por este motivo procedieron a deshabilitar la cuenta por incumplir «las políticas de LinkedIn».
El famoso caso del ordenador Portátil de Hunter Biden y su relación con la Isla de Jeffrey Epstein ya ha sido verificado como cierto y ha aparecido en innumerables medios de comunicación Fox News, BBC…. Hay registros, más de 10.000 fotos filtradas del laptop de Hunter y vídeos de Joe y Hunter Biden visitando la isla Epstein.
Se ha revelado una conexión controvertida entre la plataforma profesional LinkedIn, el partido demócrata de Estados Unidos y la CIA. A medida que salen a la luz pruebas y testimonios, surge un enigma que deja a muchos perplejos y con preguntas sin respuesta.
Un antiguo empleado de LinkedIn, bajo el anonimato, decide compartir información confidencial que sugiere una estrecha relación entre la red social y el partido demócrata. Según sus afirmaciones, altos ejecutivos de LinkedIn habrían mantenido reuniones privadas con prominentes miembros del partido, incluidos algunos asesores cercanos al liderazgo demócrata.
Estas reuniones supuestamente trataban sobre estrategias de campaña, financiamiento político y la promoción de mensajes favorables al partido en la plataforma. Se alega que LinkedIn habría utilizado su amplia base de datos y su sofisticado algoritmo para manipular la visibilidad de ciertos contenidos y promover a figuras políticas afiliadas al partido demócrata.
El informante también afirma que algunos usuarios que expresaron opiniones críticas o cuestionaron la actuación del partido demócrata y sus miembros, especialmente en relación con los delitos de Hunter Biden, hijo del presidente Joe Biden, sufrieron represalias en la plataforma. Sus cuentas fueron suspendidas, y en muchos casos, eliminadas sin previo aviso ni explicación clara.
LinkedIn emitió un comunicado oficial negando todas las acusaciones y calificándolas de infundadas. La empresa argumentó que siempre ha seguido políticas estrictas de imparcialidad y que no tiene ninguna afiliación política.
A medida que avanzaba la investigación, surgieron más pruebas que parecían respaldar las acusaciones. Documentos filtrados y testimonios adicionales revelaron correspondencia interna entre altos ejecutivos de LinkedIn y figuras políticas del partido demócrata. Estos correos electrónicos sugerían una coordinación en la promoción de ciertos contenidos y la supresión de otros que pudieran ser perjudiciales para el partido.
LinkedIn continuó defendiendo su postura de neutralidad política y rechazó cualquier vínculo con el partido demócrata. El enigma de LinkedIn y su posible manipulación política permanece sin resolverse.
Los usuarios afectados expresaron su indignación y frustración, argumentando que sus publicaciones estaban basadas en información verificable y que estaban ejerciendo su derecho a la libertad de expresión y al debate abierto sobre asuntos de interés público. La falta de transparencia y la ausencia de un proceso de apelación efectivo profundizaron aún más el malestar entre la comunidad de usuarios.
A medida que la noticia se propagaba, diversos grupos y organizaciones defensoras de los derechos digitales alzaron su voz en apoyo a los usuarios afectados. Llamaron la atención sobre la importancia de garantizar la libertad de expresión en las plataformas en línea y cuestionaron las prácticas de moderación de LinkedIn.
La respuesta oficial de LinkedIn fue escueta y generó aún más confusión. La empresa emitió un comunicado en el que afirmaba que las cuentas fueron eliminadas debido a violaciones de sus políticas de contenido, sin entrar en detalles sobre las políticas específicas infringidas ni proporcionar ejemplos concretos del contenido eliminado.
Esta falta de claridad y la negativa de LinkedIn a abordar de manera transparente el problema alimentaron aún más la especulación y la desconfianza hacia la plataforma. Los usuarios afectados intentaron contactar con el servicio de atención al cliente de LinkedIn, pero recibieron respuestas genéricas y evasivas que no aportaban una solución satisfactoria.
A medida que el debate crecía, se intensificaron las protestas y los llamados a boicotear LinkedIn. Usuarios prominentes y grupos activistas instaron a los profesionales y empresas a abandonar la plataforma en protesta por las prácticas de censura y la falta de transparencia. Sin embargo, a pesar de la presión, LinkedIn se mantuvo firme en su postura y no se devolvieron las cuentas eliminadas.
La falta de una resolución clara y la persistencia de Linkedin y la censura generaron una creciente indignación entre los usuarios afectados y en la opinión pública en general. La controversia se extendió más allá de las redes sociales y llegó a los tribunales, donde los usuarios afectados presentaron demandas colectivas alegando violaciones a la libertad de expresión y discriminación política.
Las demandas legales y la presión pública llevaron a la apertura de investigaciones por parte de organismos reguladores y legisladores. Los casos se convirtieron en un punto focal del debate sobre la moderación de contenido en las redes sociales y el alcance de la libertad de expresión en el entorno digital.
Sin embargo, a medida que las investigaciones avanzaban, surgieron obstáculos legales y políticos que dificultaron la resolución del caso. Los defensores de los usuarios afectados argumentaron que LinkedIn, como una empresa privada, tenía el derecho de establecer y hacer cumplir sus propias políticas de contenido. Por otro lado, los críticos argumentaron que la influencia y el alcance de las redes sociales requerían una mayor transparencia y responsabilidad en sus prácticas de moderación.
Las audiencias y los debates se prolongaron durante meses, pero no se logró un consenso claro sobre cómo abordar la situación. Mientras tanto, los usuarios afectados seguían sin tener acceso a sus cuentas y sin una resolución satisfactoria.
En medio del estancamiento y la creciente presión, LinkedIn enfrentó una caída significativa en su base de usuarios.
A medida que pasaba el tiempo, LinkedIn se vio afectado por escándalos adicionales relacionados con prácticas opacas y acusaciones de sesgo político. Esto generó aún más desconfianza entre los usuarios y erosionó la reputación de la empresa.
A pesar de la creciente evidencia y las demandas de transparencia, LinkedIn se mantuvo firme en su postura de no devolver las cuentas eliminadas. La empresa argumentó que sus acciones estaban en línea con sus políticas internas y que cualquier apertura a la resolución podría sentar un precedente peligroso.
Con el paso del tiempo, la polémica en torno a la censura en LinkedIn y la eliminación de cuentas relacionadas con los delitos de Hunter Biden se a convertido en un tema olvidado. La falta de una resolución clara dejó a los usuarios afectados en la incertidumbre y alimentó la sensación de impotencia ante el poder de las redes sociales.
A medida que las discusiones y los debates continúan, queda por ver si surgirán nuevas regulaciones y políticas que aborden de manera más efectiva las preocupaciones relacionadas con la censura en las redes sociales y la protección de los derechos de los usuarios. Mientras tanto, la historia de la censura en LinkedIn y sus consecuencias sigue siendo un tema de interés y debate en la esfera digital.